17 de enero de 2025
Un estudio con 22.750 gemelos finlandeses analizó la relación entre actividad física en el tiempo libre (LTPA), envejecimiento biológico y mortalidad. Se identificaron cuatro niveles de actividad: sedentario, moderado, activo y muy activo. Aunque los más activos mostraron hasta un 7% menos riesgo de mortalidad, este efecto se desvaneció al ajustar por genética y estilo de vida. Los resultados sugieren que la longevidad asociada al ejercicio puede deberse más a factores genéticos que al propio entrenamiento.

